Millonario de Pobla
















La Academia de Artes y Ciencias Cinematográficas de Hollywood parece tener especial predilección por las historias de esfuerzo, que culminan generalmente con un final feliz y que dejan un mensaje de optimismo y esperanza. En tal caso, los méritos cinematográficos del filme son lo que menos pareciera importarles a los miembros de la Academia, que aparentemente se otorgan la facultad de contribuir a hacer de la humanidad un lugar mejor, premiando a obras que dificilmente pasarán a la historia por su contribución al arte del cine.
Es lo que sucede con la multi premiada "Slumdog Millionaire", uno de los filmes más manipuladores que han aparecido en el último tiempo, y que a pesar de su éxito arrollador de taquilla, constituye un paso atrás en la carrera de su director Danny Boyle, cineasta controvertido pero con obras interesantes, como "Shallow Grave" y sobre todo "Trainspotting". En estos dos filmes, Boyle se dedica a dejar que la cámara sea testigo de la acción y no hace concesiones cuando se trata de mostrar la crudeza de la marginalidad y decadencia de sus personajes. Por el contrario, en "Slumdog Millionaire", Boyle parte con la premisa de mostrar un héroe que aparentemente comparte rasgos con los protagonistas de sus anteriores filmes. La diferencia es que en "Slumdog Millionaire" la culpable de las desventuras es una sociedad depredadora y violenta que intenta aplastar al héroe atorrante por todos los medios posibles, basándose en la idea que un marginal, por su origen, no tiene derecho a salir de lo que eufemísticamente se conoce como "el círculo de la pobreza". Sin embargo, a pesar de todas las brutalidades que le ocurren a nuestro héroe, su alma permanece intocada y prístina como el cristal más puro. La comparación no es antojadiza, ya que es precisamente en esta característica de forzada pureza donde radica la diferencia con el protagonista de "Trainspotting" y la manipulación que del espectador hace Boyle. Si ya resulta dificil creer que la marginalidad, la pobreza y la violencia no contaminen los actos de un personaje, menos creíble resulta la idea que no asuma responsabilidad alguna por sus actos, que es precisamente lo contrario de lo que hace el protagonista de "Trainspotting", que tiene bien asumido el hecho que él es el mayor culpable de la situación en que se encuentra. No es casualidad que casi dos tercios de la película se dediquen a mostrar lo que le ocurre a los protagonistas en su etapa infantil, recurso que tiene como objetivo hacer más evidente la indefensión en que se encuentran ante un mundo malvado y que no entrega oportunidades. Esto no tendría nada de malo si el director intentara dar un tratamiento realista a la narración, pero su insistencia en dar a la historia un tono de fábula moralizante, le quita sorpresa al guión y produce el efecto contrario al que uno esperaría de una historia centrada en los horrores de la marginalidad en la India actual. Si desde el principio tenemos la convicción que nuestro héroe es un alma inpoluta, y que sin importar lo que ocurra tendrá la recompensa debida por su pureza, no importa cuanta secuencia violenta en contra de niños de la calle, o asesinatos masivos por causas religiosas se muestren en la película, ya que tales episodios sólo tendrán carácter anecdótico ante la inevitabilidad del final feliz que se presiente desde la secuencia inicial del filme. Es probable que "Slumdog Millionaire" sea el inicio de una colaboración millonaria entre la fábrica de cine de Bollywood y su contraparte estadounidense, pero como obra cinematográfica resulta una pieza intrascendente y fallida, debido a su insistencia en no permitir que el espectador se involucre y llene los vacíos que le hubiera entregado un guión mejor elaborado, de manera de poner de manifiesto el horror de la pobreza y deshumanización, motivos que por sí solos pueden producir la reflexión sin necesidad de filtros bien intencionados por parte del director de la película.

Comentarios

PROFESORA dijo…
Estimado Profesor: recién leo sus dos comentarios, de allí la tardanza en mi respuesta. Los alumnos y alumnas es extraño que comenten por lo tanto es un ejercicio que había dejado.
En fin, me extraña lo que me dice puesto que este archivo, muy interesante por lo de más y clarificador, lo manejo hace un tiempo y siempre con autoría. Si quiere le envío el archivo que a vecesdoy en fotocopias a los alumnos/as.
Obviamente no soy dada a los plagios ni nada que se le parezca, menos en nuestra profesión tan mal mirada por muchos.
No me había percatado de el error y sin duda lo corregiré.
Espero poder seguir haciendo uso de dicho documento y obviamente con la autoría correspondiente.
Saluda.
Unknown dijo…
Totalmente en desacuerdo.
Danny Boyle está, con este film, en uno de sus puntos mas altos. Creo mucho mas manipulador un filme como Trainspoting o 28 días, de su filmografía, ya que aquellos pretenden captar al espectador por medio de ampulosos dramas o suspense, otrora alabados, donde el efecto por el efecto, el exceso (muy atractivo para quienes viven vidas sedentarias sin ningún riesgo) es lo que atrae a las mentes poco avezadas ávidas de un Shutazo que avive sus pálidas vidas. El cine siempre depende de su público, y el Hommo videns de hoy (aplaudiendo aquella teoría de Sartori) tiene un nivel de abstracción y reflexión paupérrimo.
Cinematograficamente, Boyle, siempre ha sido un excelente narrador y eso no está en discusión.
La película Slumdog Millonaires me parece una película sincera, llena de amor, donde el realizador pasó por mil y una peripecias para lograr finalmente darle forma a esta pelicula, tomó el camino para mi mas sabio: se dejó llevar por el universo, aquel que te llevará al mejor lugar y no al que tu mente limitada cree.
Por otro lado films como este que pregonan el amor, en un país donde la mística, desde los tiempos del Bhagavad Gita, son la guía y el Dios, la belleza y el canto, me parecen estupendos. Como realizador, y sabiendo profundamente lo que se siente al enfrentar un desafío sin red, lo de Boyle me pareció muy valiente, al extremo, abordar una narrativa en un país de semejante fuerza espiritual no es para cualquiera, lo aplaudo, su esfuerzo ha sido descomunal, lleno de vida, mas allá de academia, cosa que realmente me tiene sin cuidado, su película y la de todos los que participaron en ella, merece un honor y un respeto mayor.
Saludos.
Amapola dijo…
no he visto esa pelicula, me han hablado mucho de ella. creo que por fata de tiempo ... pero al parecer la vere este finde en buena compañia.

saludos

Amapola Palacios

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